Daily Bread/Pan Diario 2023 // Marzo 20

Daily Bread/Pan Diario Lunes 20 Marzo de 2023

Lectura: Isaías 22-23

Cap. 22 Profecía contra Jerusalén

En el capítulo 22 comenzamos leyendo sobre un acontecimiento muy fuerte que estaba pasando alrededor del pueblo de Jerusalén, en este caso llamado el valle de la visión.

En un tiempo de angustia el Señor llama al pueblo a humillarse y buscar de Él. A pesar de las malas circunstancias el pueblo seguía por sus malos caminos, desobedeciendo al mandato de Dios. Viendo esto, el Señor da una profecía en contra de Jerusalén de que no se le perdonaría su pecado hasta el día de su muerte. El Señor manda a traer a Sebna y le dice que lo destituirá de su cargo y será expulsado de su puesto, más a Eliaquin quien servia a Dios le bendice.

 Cap 23 Profecía contra Tiro

En el capítulo 23 leemos de Tiro una ciudad marina que era el centro comercial de las naciones, cuyos comerciantes son príncipes, y sus negociantes reconocidos en la tierra. Pero vemos como esta ciudad era un pueblo desobediente que no obedecía ni tomaba en cuenta las leyes de Dios. A si que Dios establece juicio contra la ciudad y los humilla para derribar toda altivez de ellos. Pero vemos que a los que sirven al Señor, Él les es fiel. Las ganancias de este pueblo no serán almacenados ni atesorados mas serán para los que habitan en presencia del Señor, para que se alimenten en abundancia y se vistan con ropas finas.

Cuán importante es la obediencia a Dios. El que obedece es alguien que tiene fe en su palabra. Pues su palabra nos dice que sin fe es imposible agradar a Dios. (Hebreos 11:6)

Al Señor le duele que arranquemos su ley de nuestro corazon para seguir nuestra propia ley.

Quitémonos de toda soberbia e ignorancia que nos lleva  a no considerar a Dios en nuestras vidas y pongamos a Dios en primer lugar todos los días. La desobediencia y el fallar constantemente nos vuelve rebeldes y trae consecuencias. Mas si hoy hemos fallado, humillémonos delante de Él y busquemos su rostro mientras pude ser hallado. (Isaias 55:6)

Aún estamos a tiempo de alcanzar misericordia y gracia por el amor que Él nos tiene. Volvamos a Él, preparémonos y regocijémonos en sus mandatos que nos dirijen al camino que nos da vida. No con nuestras propias fuerzas sino con su Santo Espíritu. Recordando que la obediencia activa las promesas de Dios sobre nosotros y no solo para nosotros si no tambien para nuestras generaciones!
¡Tus hijos y los hijos de tus hijos! Amen 5020202020Recent